Alamar y Presunto culpable, triunfan en Morelia
Por Leticia Carrillo; desde Morelia. Michoacán
Alamar, de Pedro González-Rubio y Presunto culpable, de Roberto Hernández y Geoffrey Smith, se alzaron con los premios a Mejor Largometraje Mexicano de Ficción y Mejor Largometraje Documental Mexicano respectivamente, -las categorías principales en competencia- en el Festival Internacional de Cine de Morelia.
La ópera prima de ficción de González-Rubio ganó además, el Premio del Público junto con Soundtrack for a revolution, de Dan Sturman y Bill Guttentag, que fue uno de los estrenos de la séptima edición del festival michoacano.
“Le doy gracias a la madre naturaleza por permitirnos a mí y a los espectadores reconocernos como parte de ella, no vernos como algo externo, y destruir lo que nos rodea y a nosotros mismos; es una mirada al interior a través de este entorno para apreciar su belleza”, dijo Pedro González-Rubio a los medios de comunicación después de recibir El Ojo, el máximo reconocimiento del certamen fílmico.
El Jurado integrado por el director Luis Mandoki, el artista plástico Gabriel Orozco, el crítico José María Riba y el académico Paul Julian Smith afirmó que las razones por las que fue elegida Alamar fueron: “ el deseo de alentar un cine que no se someta necesariamente a fórmulas preestablecidas ni al mero afán comercial; un cine que apueste al riesgo sin caer en la tentación de la forma por la forma”.
En tanto, José Antonio Rodríguez Zuñiga, el protagonista del aclamado documental Presunto culpable expresó sumamente emocionado: “Los deseos se cumplen, eso creo y hoy estoy deseando que esta película genere el bien y no el odio y peleas, ¡qué viva el cine! y la gente que lo hace posible”.
Alamar, que tiene como escenario la Reserva de la Biósfera de Banco Chinchorro, en Quintana Roo, cuenta, con un tono intimista, la relación de amor y ternura que establecen un padre y su hijo de cinco años, días antes de que este último parta a Italia a vivir con su mamá.
Por su parte, Presunto culpable, narra el injusto proceso judicial al que fue sometido José Antonio Rodríguez después de ser aprehendido y acusado de un homicidio que no cometió. Roberto Hernández y Layda Negrete, dos estudiantes de posgrado de Derecho, toman el caso y a través de la cámara consiguen por un lado, revelar las contradicciones del fallido sistema de impartición de justicia mexicano y por otro, liberar a “Toño”.
De los reconocimientos entregados caben destacar las Menciones Especiales que recibieron Vaho, de Alejandro Gerber, en la categoría de Largometraje Mexicano de Ficción; y Flores en el desierto, de José Álvarez, y El informe Toledo, de Albino Álvarez, en el apartado Largometraje Documental Mexicano.
Así como La sirena y el buzo, de Mercedes Moncada y Rehje, de Anaïs Huerta y Raúl Cuesta, que obtuvieron el Premio y la Mención Especial respectivamente.
