Crítica: «Misión Imposible: Repercusión»: Intensa, entretenida e irresistible
Por Andrés Bayona
Es imposible reseñar “Misión Imposible: Repercusión” (Mission Impossible: Fallout. 2018) sin mencionar las espectaculares secuencias de acción, los increíbles efectos especiales y los “stunts” más peligrosos de Tom Cruise durante más de dos horas. “Repercusión” es un sueño para los adictos a las películas de acción. A pesar de la complejidad de su trama, la cual presenta una misión, literalmente, imposible de cumplir, esta nueva entrega es la mejor de la franquicia y la película más entretenida del verano.
Tom Cruise regresa como el agente encubierto, Ethan Hunt, en una nueva aventura en la que lo veremos correr, saltar, navegar, escalar, pelear y pilotear un helicóptero para salvar su vida. “Misión Imposible: Repercusión” casi no utiliza CGI y, definitivamente, esto marca la diferencia, al plasmarle mayor realismo a la historia y credibilidad a los personajes. “Repercusión” es la sexta entrega de la serie y la segunda dirigida por el ganador del Oscar, Christopher McQuarrie. La verdadera misión, en esta oportunidad, es dejar de pensar en la trama lo antes posible. Lo que sabemos es que Ethan va a solucionarlo de alguna u otra forma y, por supuesto, lo logra.
El escenario: tres esferas de plutonio han desaparecido, lo cual se traduce en el fin de mundo y, más aún, cuando cae en manos de contrabandistas. Un lunático que se hace llamar “John Lark” cree que sólo el sufrimiento puede salvar lo que resta del mundo real. Su aliado es el anarquista Solomon Lane (Sean Harris), el antagonista de la anterior Misión Imposible. El jefe de Hunt (Alec Baldwin) quiere capturar a Solomon, al igual que la cabeza del CIA, interpretada por Angela Bassett. Y no olvidemos que Ilsa (Rebecca Ferguson) está de regreso buscando lo que no se le ha perdido. Al parecer, nadie es confiable, a excepción del equipo de Ethan: Benji (Simon Pegg) y Luther (Ving Rhames). Ahora el dilema de nuestro héroe: ¿Es más importante salvar una vida que la de millones?
También tenemos a Henry Calvill, también conocido como Superman, quien trae consigo giros inesperados en su papel de Walker, un agente del CIA contratado para vigilar cada paso de Ethan. Vanessa Kirby le inyecta un aire nuevo a la historia interpretando a la temida “Viuda Blanca” y también regresa Michelle Monaghan, interpretando a Julia, la esposa de Hunt y quien ahora lucha contra una terrible plaga en Kashmir.
Bastante información, ¿no? La realidad es que no hay excusa para insertar tanta información en más de dos horas en donde lo único que verdaderamente importa es la acción y los efectos especiales. Por supuesto, vemos a Cruise pasando el mejor rato de su vida merodeándose por las terrazas de Londres, montando motocicleta en las calles de Paris, peleándose en un baño de un lujoso bar y piloteando helicópteros.
Mi mejor recomendación: antes de verse “Misión Imposible: Repercusión”: busquen el cine que tenga disponible la pantalla más grande y si ofrece tecnología IMAX, mucho mejor. Existe el rumor de que ésta es la última entrega de Misión Imposible. Si es así, puedo decir que Tom Cruise, después de trabajar en esta franquicia por 22 años, se logra despedir de Ethan Hunt con gloria y orgullo.
Foto: ABC Color
Título original: Mission Impossible: Fallout. Duración: 147 minutos. Dirección: Christopher McQuarrie. Guion: Christopher McQuarrie. Basada en los personajes creados por Bruce Geller. Música: Lorne Balfe. Fotografía: Rob Hardy. Reparto: tom Cruise, Henry Cavill, Ving Rhames, Simon Pegg, Rebecca Ferguson, Sean Harris, Angela Bassett, Vanessa Kirby, Wes Bentley, Frederick Schmidt, Michelle Monaghan y Alec Baldwin.
