El portal del cine mexicano y mas

Desde 2002 hablando de cine



Noticias

2017-08-10 00:00:00

Crítica: «El planeta de los simios: la guerra». El éxodo simiesco

Por Samuel Lagunas

No son pocas las referencias existentes entre el relato bíblico del éxodo del pueblo de Israel y la nueva entrega de la saga de “El planeta de los simios” reiniciada con un nuevo y mejoradísimo tropel tecnológico en 2011 bajo la dirección de Rupert Wyatt y encabezados desde el principio por el ya legendario Andy Serkis interpretando de forma post-humana (o sea, auxiliado por efectos digitales) a César, un prototipo experimental de simio que desarrolla un lenguaje humano además de la capacidad de expresar emociones de una forma más parecida a la de los hombres.

“El planeta de los simios: la guerra” nos arroja desde el inicio a un combate con resonancias de la Guerra de Vietnam destapando todo un caudal de referencias cinematográficas que van desde el cine bélico de Kubrick hasta “Apocalypse now” (1979) de Coppola. Ya no importa por qué ha comenzado la batalla entre hombres y simios, sólo se sabe que es casi imposible detenerla. Pero después de ese frenético primer acto, Reeves opta por un camino mucho menos convulso, aunque igual de dramático: el cautiverio. Ya en la anterior entrega, “El planeta de los simios: confrontación” (2014), Reeves había insuflado en la historia un aliento ecologista y territorial al colocar como conflicto central la recuperación y rehabilitación de una presa hidroeléctrica. Este infructuoso intento de convivencia degenera ahora en renovadas formas de esclavitud y de maltrato no sólo entre humanos y simios sino al interior de los mismos grupos de hombres. Mientras que César se embarca en una venganza familiar, su pueblo sale rumbo a la tierra prometida donde no tendrán que preocuparse ya más de las personas. En el camino, son capturados por el Coronel y su despiadado ejército fundamentalista llamado “Alfa y Omega” con el propósito de utilizarlos como mano de obra para la construcción de un muro que los proteja de una invasión que se aproxima. Será en ese campo de concentración donde César se reencuentre con los suyos y aprenda a lidiar con sus fantasmas personales para así encabezar definitivamente el nuevo éxodo. En esa tarea será acompañado por el siempre fiel orangután Maurice (Karin Konoval), por el incansable Rocket (Terry Notario), por el ingenuo y picaresco “Simio malo” (Steve Zahn) y por Nova (Amiah Miller), una niña humana que encuentran escondida en un campamento humano y que no puede hablar.

Esta incapacidad de la palabra es uno de los rasgos más simbólicos de la cinta ya que apunta hacia las atroces consecuencias de una guerra incesante y descompuesta: ante el caos y el dolor, las palabras se amedrentan en el silencio; no obstante, es sólo en la aceptación de ese silencio donde puede surgir una nueva fraternidad. La inclusión de Nova en la manada de simios es precisamente signo de esa nueva comunidad que acontecerá en la tierra prometida.

No es casual tampoco que la crítica bíblica haya vinculado al libro del Apocalipsis con el libro del Éxodo; y Reeves, voluntaria o involuntariamente, logra crear un complejo relato simbólico y mítico donde ambos libros se encuentran. El Coronel (Woody Harrelson) encarna a la bestia que guía a su ejército a la batalla contra el mesías, su faraónica presencia, además, no está exenta de contradicciones personales que lo enriquecen y justifican. Su ejército usurpa los títulos divinos de “Alfa y Omega” al mismo tiempo que subvierte los ideales democráticos norteamericanos en una forma de tiranía muy cercana al totalitarismo. Si hay plagas, éstas las hemos provocado nosotros; si hay primogénitos muertos, no es porque algún dios lo haya hecho sino porque nosotros mismos los hemos matado. Ante esta descarnada verdad, César, el héroe, no teme en adoptar la lógica del “sustituto” cuando no soporta más la explotación a la que someten a sus simios, además de que dolorosamente va aprendiendo a estar solo hasta el punto en que está listo para delegar su liderazgo, como Moisés, justo antes de entrar a la tierra prometida.

Con “El planeta de los simios: la guerra”, Reeves ha conseguido revivir cinematográficamente el mito del “éxodo” con una fuerza visual sobresaliente y una pertinencia nada desdeñable, sin despojarlo del tono apocalíptico con el que fue revestido varios siglos después. Sí, el de los simios es un mundo con héroes cuasi-divinos que dan su vida por las y los demás, pero sólo así es posible reconstruir la vida desde las ruinas.  
  
Ficha técnica:

Título original: War for the planet of the apes. Año: 2017. Duración: 140 min. País: Estados Unidos. Dirección: Matt Reeves. Guion: Mark Bomback, Pierre Boulle, Matt Reeves. Fotografía: Michael Seresin. Edición: William Hoy. Música: Michael Giacchino. Reparto: Andy Serkis, Woody Harrelson, Steve Zahn, Gabriel Chavarria