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2015-05-23 00:00:00

Cannes 2015: La cita de Cannes con el cine africano, «Lamb» y «Oka»

Por jean-Pierre Garcia
Desde Cannes

Es un tema que cada año se puede leer en lo que toca al cine africano, la ausencia en Cannes de este cine en las selecciones tanto oficial como paralelas. Palabras que no son siempre justificadas si se mira hacia la producción cinematográfica en el continente. Se dice también que el cine latino americano no consigue tampoco el espacio que se merece. Estas expresiones de rencor se pueden entender pero al final no tienen siempre sentido. Hemos hablado en Correcamara de varias películas latinas en competencia, en Un Certain Regard como en La Semana de la critica y en la Quincena de Directores.

Nos queda hablar de dos películas de África negra y también sería pertinente  presentar una película que me perdí, la del cineasta de Maruecos, Nabil Ayouch "Much Loved" (Muy amadas) seleccionada en La Quincena. Esta película toca al tema de la prostitución femenina en una ciudad muy turística, Marrakech. Se tendría que comparar más tarde con "Las Elegidas" del mexicano David Pablos.

"Lamb" (Cordero) es la primera película de Yared Zeleke, un muy joven director de Etiopía y es la primera película de este país selecionada en la parte oficial del festival de Cannes. Como lo decía con cierto orgullo Thierry Frémaux, director del festival. Por haber seguido la carrera de este joven autor puedo tdar testimonio de su talento y de su búsqueda creativa. Vino por primera vez a buscar apoyo en Amiens cuyo fondo de apoyo al desarrollo de guión cumple con veinte años de existencia. Varias películas mexicanas que se ganaron esta beca, una de las más exitosa fue "La Jaula de Oro" de Diego Quemada Diez. Después de Amiens Yared Zeleke se ganó varios fondos europeos (Francia, Alemania, Suiza, Noruega, Unión Europea- programa ACP).

El tema es muy sencillo, un niño de unos diez años cuya madre muere, se encariña con su joven oveja. Este animal lo sigue por todas partes como lo hiciera un perro. Su padre va a buscar trabajo en la gran ciudad para poder sacarlo adelante y lo  deja al cuidado de su hermano. El niño crece y la oveja también y a pesar de sus esfuerzos para ir a la ciudad y volver con su padre, el joven Ephraim no podrá hacer realidad sus sueños...

Esta crónica íntima de una familia en esta parte montañosa de Etiopía nos es casi extraña pues esta fuera de los clichés sobre este país. Etiopía es un país cristiano desde siempre, un paías tomado por el movimiento rastafari pero aquí no se trata ni se piensa en esto. Aquí se habla de un país con cultura y tradición secular muy fuerte, un país con identidad a pesar de la hambre y de las sequías, de las guerras pasadas. La actuación y la puesta en escena son muy buenas aunque un poco clásicas en términos de narración. La dramaturgia lleva lo necesario para atraer el público y nos permite sentirnos cerca de este joven a quien le gusta cocinar como le enseño su mamá. Se abren ciertas puertas sobre lo que es probablemente el joven Ephraim, en su futuro. Pero todo funcciona con sutileza  en el guión.

Los aplausos del público dan constancia de la capacidad de "Lamb" para seducir a un público curioso de África. Una África con dramas pero vista a través de la mirada de un niño inocente.

Con "Oka" (Nuestra casa), se trata de la obra mas reciente de un maestro del cine africano Souleymane Cissé. Nacido en Mali (Africa del Oeste) en 1940, estudio cine en el VGIK de Moscú y de esta formación clásica guardo una mirada muy fuerte sobre la identidad y la cultura milenaria de su país. A lo largo de sus cinco películas de largometraje dibujo unos retratos impresionantes del Mali contemporáneo en "Den Muso" ( la chica joven) y "Baara" ( el Trabajo) antes de hacernos viajar en el tiempo con "Finyé" (El Viento) y "Yeelen" ( La Luz). Fue con esta película "Yeelen" que  por  primera vez, el cine el continente africano entraba en la competencia internacional de Cannes ( en 1987), además de ser galardonada por el jurado internacional.  "Oka" no es un largo de ficción sino un documental que podría ser el testamento de un cineasta cuyo país está en guerra contra los integristas islamistas que actúan con terror en el norte de Mali, a la frontera argelina. Este documental no tiene nada que ver con esta guerra, como lo que hizo el año pasado Abderrhamane Sissako en "Timbuktu".

"Nuestra casa" es la casa de su familia, la casa que sus antepasados construyeron en un bario de Bamako la capital de Mali. Una casa que por culpa de un juez corrupto les robaron unos vecinos. Con el apoyo de policías también corruptos, echaron fuera de casa a las tres hermanas del cineasta. Estas señoras ya mayores (de mas de setenta años de edad) expresan con mucha dignidad lo injusto de esta decisión de "justicia". A pasos lentos vemos como el gran director se da cuenta que la única arma que posee y que de sentido a su lucha de toda la vida (defender y valorar su identidad como ciudadano)  es el cine. Y en este caso es su propria identidad que es amenazada: por eso filmo este documental.

Un país invadido por los terroristas y con un alto nivel de corrupción, volvió indefenso este pueblo históricamente tan importante en Africa del oeste. Más allá de un caso personal, Souleymane Cissé da un poder universal a esta historia, transforma esta lucha contra la injusticia personal en un manifiesto que vale para el país entero.
 

Foto: "Lamb" de Yared Zeleke